Muchas veces en las consultas surgen comentarios del estilo ¨me da miedo consumir pastas porque voy a aumentar de peso¨, ¨cuando entreno solo como proteínas¨ o ¨cuando como carbohidratos siempre me paso con la porción¨. Vamos a partir de la base que los Carbohidratos son nuestra BASE FUNDAMENTAL de energía para cualquier actividad, sea trabajar, estudiar, hacer cosas de la casa o un deporte.
Existen dos tipos básicos de Carbohidratos:
- De absorción rápida/índice glucemico alto: productos de pastelería, golosinas, azúcar, miel.
- De absorción lenta/índice glucemico bajo: arroz integral, panes integrales, legumbres.
La respuesta que tienen en el cuerpo, es diferente.
Los carbohidratos son como collares de perlas. Cada perla es una unidad de glucosa. En el caso del IG alto, este collar está roto, la absorción es rápida (lo que genera un aumento repentino de la glucosa y por tanto de la insulina) y posiblemente puede originar más adiposidad. Los alimentos con IG bajo tienen una unión más fuerte entre perla y perla, por lo que al romperse más lento, ayudamos al cuerpo a que lo procese mejor y no origine curvas de glucosa e insulina muy pronunciadas.
La cantidad de carbohidratos que una persona debe incluir es su rutina diaria de comidas dependerá de muchos factores como su metabolismo basal, el ejercicio que realiza, el objetivo que tiene, si presenta alguna condición patológica, etc.
CONCLUSION: No los saques de tu alimentación diaria porque son sumamente importantes, lo fundamental es darle prioridad a la CALIDAD y CANTIDAD. Incluso si el objetivo es generar hipertrofia muscular o contribuir al acondicionamiento corporal, aportando carbohidratos de buena calidad y en su cantidad justa, se logra que las proteínas sean utilizadas para su función principal y no como fuente de energía.
Lic. Alejandra Grela
Licenciada en Nutrición
MP 2785